Emiliano Ulloa, vecino de La Boca, intentó que unos prefectos dejen de pegarle patadas a una persona que ya estaba reducida y en el piso. La reacción de los prefectos fue incluirlo a él en la golpiza. Le pegaron entre 10, lo metieron preso y le armaron una causa. Todo esto a dos cuadras de su casa. Imperdibles declaraciones.
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